Son muchas las veces que recuerdo el subir a la Torre de Santa María, quizás sean más las que realmente subiera, pero no hay una que me deje indiferente. Su aproximación a la costa ofrece una mirada al norte llena de contrastes. La mirada al sur nos envuelve en uno de los mundos más alpinos que conozco, aunque sea de escasa altura.
Este año, se puede gozar de un corredor del Marqués de suave inclinación, con una entrada sin paso en mixto y con un diedro final cargado de nieve que invita a echar a correr hacia arriba olvidándose de los piolets. No obstante, quizás mi percepción se vea distorsionada, debido al paso del tiempo desde la primera vez que lo hice. Antesdeayer, era la segunda.
Nuestro intento a la Pili-Cristina se vio frustrado nada más llegar a la base de la vía y ver como arroyaba tal cantidad de agua por un hielo costra que de lejos no envidiaba a ninguna mítica vía en hielo de las mejores cordilleras. La "Directa" desde Arriondas, se vé esplendida, hipnotizadora de los alpinistas más abezados.
Si, si, solo plantarte a escasos metros de ella, y te cae el alma a los pies, después de tal caminata para solo un único objetivo.
Siempre nos quedará el corredor del Marqués, fiel a nuestros impulsos. Se deja querer como casi toda persona normal, sin darle importancia a sus encantos. Con solo echar una vista atrás y a los laterales de la que lo estamos subiendo, vasta.
Magnífico, cuando menos fantástico.
Muy buena actividad y con una gran compañia. A ver si aguanta la nieve y podemos hacer esa esquiada que nos queda pendiente por la zona de Fuente Dé. Cuidate!!!
ResponderEliminarMuchas gracias Vitor!!
EliminarSería muy bueno despedir la temporada con esa esquiada! Nos vemos!!!