Mientras que Lorena trabaja, aquí el chabalín se dedica a dar paseos por San Vicente, más concretamente por la playa. Allí encuentro un patio de juego acompañado de la brisa marina y de las olas, en un paisaje solitario. Las horas pasan de forma rápida. Es un lugar de reflexión. Un sitio en el que me encuentro a gusto.
tas como una oveya, jejejeje, como mola!!!!!!
ResponderEliminarEse Rober, que ya va hasta a la playa con los piolos, jejeje!!!. El vídeo genial.
ResponderEliminarYes únicu Rober!! Un abrazu.
Rober me dejas acojonao. Espero que no duermas con los piolos. Muy bueno, si señor. El caso es no perderlos de vista.
ResponderEliminarUn saludo.